Puente de Sallent

El puente del término municipal de Sallent había sufrido una ampliación del ancho del tablero a finales del siglo XIX y requería su sustitución, ya que estaba realizado con una estructura metálica en muy mal estado, además de los asentamientos que se estaban produciendo en el zonas más flexibles de la superficie del puente.

Por ello, el ayuntamiento encargó este proyecto a Landem con la orden expresa de afectar lo menos posible a la estructura original del puente, aportando mayor comodidad y seguridad a los habitantes de la localidad.

La ampliación del tablero del puente a ambos lados se realiza mediante la colocación de una prelosa en voladizo fijada con perfiles metálicos transversales que sirve de encofrado para el hormigonado del nuevo tablero. La losa descansa sobre una superficie de hormigón que no afecta a la estructura de piedra, asegurando su integridad.