Prueba piloto de carril bici en la calle Ferran de Barcelona

En los últimos años, el Ayuntamiento de Barcelona ha apostado por configurar un modelo de ciudad más sostenible, potenciando los desplazamientos a pie, en transporte público o en bicicleta. En este sentido, el Plan de Movilidad Urbana (PMU) 2024, recientemente aprobado, establece una serie de acciones encaminadas a la consecución de este reto, entre las que se encuentra la ampliación en un 40% de la red de ciclovías de la ciudad.

En este marco, el Ayuntamiento encargó a Landem el diseño de un carril bici de prueba piloto en la calle Ferran, un recorrido que, además de unir la Rambla con la plaza Sant Jaume, es uno de los más emblemáticos de Ciutat Vella. Teniendo en cuenta las características únicas de la calle. El objetivo principal de la prueba piloto es generar un eje bidireccional para bicicletas a través de un carril bici permeable, sin cierres laterales, habilitando secciones transversales y minimizando el efecto sobre el adoquín existente para evaluar si la actuación es suficiente para ordenar la convivencia entre vehículos motorizados. , bicicletas y peatones.

A pesar de que el alcance del proyecto era la definición de la prueba piloto con un coste controlado, esta actuación se propone como prueba para evaluar la viabilidad de la tipología de ciclovía. En un futuro se prevé la señalización mediante piezas de iluminación LED con forma de adoquín, simulando el pavimento, y con señales de señalización inteligente que faciliten la convivencia entre los diferentes usuarios.